Sin duda, nuestro presidente se ha rodeado de gente de su posición social y económica. Esto es de entenderse porque ¿de dónde más iba a conseguir personas para administrar el país? No dudo que algunos de ellos tengan una vocación de servicio a la comunidad, pero en su gran mayoría, en mi opinión, son personas que han vivido fuera de la realidad nacional; y no es que no vivan en el país, sino que desde su posición privilegiada no entienden lo que ocurre. Por ejemplo, cierto ministro preguntó si es que la gente quiere que el presidente les compre los generadores eléctricos, esto en referencia a los apagones, pensando que la gente de a pie puede comprar generadores como si de caramelos se tratara. Otra de sus colaboradoras, en época de pandemia, dijo que la solución para la gente pobre era colocar paneles solares en sus casas para así ahorrar energía, como salir a comprar unos cigarrillos. Pero el caso más patético es el relacionado con el caso Las Malvinas: hacernos creer que en lo sucedido no tiene responsabilidad el Estado es un descaro. (O)

Guillermo Sánchez, Quito