Desde hace algunos años en un sector desde la avenida Narcisa de Jesús, en Guayaquil, se perciben malos olores fuertes. Muchos residentes vendieron sus propiedades porque se imposibilita un buen vivir, otros seguimos sufriendo este gran malestar.

Con enorme preocupación vivimos en este sector norte residentes de algunas urbanizaciones, Metrópolis, Ciudad del Río, La Perla, Baranda, Romareda...; existe un colegio, etc. Solicitamos a las autoridades correspondientes, a las del Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica, y otras, se sensibilicen, investiguen las causas de la contaminación atmosférica, den solución a los olores fuertes como a pescado descompuesto que tenemos que aguantar a partir de las 20:00 todos los días, causando problemas de tos, dolor de cabeza, etc., a niños, adultos mayores y más residentes; pedimos de la manera más comedida nos presten atención y ayuda correspondientes. (O)

Edwin Francisco Morales Erazo, militar (s. p.), Guayaquil