Es tan difícil entender las acciones de las más altas autoridades, muchas veces viscerales o demagógicas, sin considerar la importancia que una decisión significa para una ciudad o para todo el país. Es mi criterio que una buena decisión del expresidente Lasso fue la de concesionar la construcción de esta obra al alcalde de Guayaquil, Aquiles Alvarez; pues quien sacaría real provecho de la construcción sería esa ciudad, porque, al utilizar el puente nuevo, todos los tráileres que llegan a entregar bienes de exportación, o que van a retirar bienes de importación, dejarían de utilizar las calles donde se transportan vehículos livianos.
Con la proliferación de los pseudo puertos particulares marítimos de Guayaquil, que ahora son más de doce, se han tomado los tráileres todas las calles de las urbanizaciones y ciudadelas, bloqueando entradas a garajes y afectando la tranquilidad de los vecinos, pues operan las 24 horas del día, los siete días de la semana, como sitios de espera para descargar o cargar.
Daniel Noboa deroga decreto de traspaso del quinto puente al Municipio de Guayaquil
Por otro lado, era el Municipio de Guayaquil el que debía financiar la obra y recuperar el capital, cobrando un pontazgo durante un plazo razonable de tiempo. (O)
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Carlos Bernal Lange, ingeniero civil, Portoviejo
