Según entendidos en la materia como el Fondo Monetario Internacional, el promedio del crecimiento global del mundo el próximo año será de 3,2 %. Desglosado por regiones, América Latina crecerá el 0,6 %. Asia crecerá el 6,2 %. África subsahariana (al sur del desierto del Sahara), el 3,4 %; región del Medio Oriente, norte de África, Afganistán y Pakistán crecerán el 3,4 %.
Con esta noticia, es imperdonable no averiguar por qué América Latina crecerá poquísimo con relación a naciones que años atrás estaban en condiciones de subdesarrollo. Mientras los asiáticos han creado una meritocracia educativa en la cual estudian cada vez más y mejor, en América Latina la calidad educativa se está quedando atrás, se habla más del pasado y poco de los innovadores del futuro.
Mientras los asiáticos viven guiados por el pragmatismo y obsesionados por el futuro, los latinoamericanos vivimos guiados por la ideología y obsesionados por el pasado. Para crecer, será urgente realizar un cambio radical en el pénsum de estudios, y cambios en la Constitución que está diseñada para someter a un pueblo al atraso, como ocurre en países de Latinoamérica con gobiernos esclavizantes, como durante el correísmo en Ecuador, que dejó deuda al Estado; esos despilfarros, corrupción, sobreprecios siguen siendo pagados por el pueblo; y los que ahora reclaman son acólitos del correísmo. Nuestro país necesita un cambio urgente. (O)
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Rodolfo López Osorio, arquitecto, Guayaquil