El escritor, filósofo y poeta estadounidense Ralph Waldo Emerson en una de sus obras indicó que el que aspire a ser un hombre debe de ser inconformista, aquel que aspira a cosechar victorias inmortales no ha de detenerse ante la palabra “bien”, sino que ha de indagar si realmente hay bondad; al final, nada es tan sagrado como la integridad de tu propia mente.

Una vida ejemplar

Hay que usar la intuición como medio para comprender la realidad, confía en ti y lucha por ser tú mismo. Jamás aceptes que nadie te dé pensando porque nadie es mejor que tú. Estudia, prepárate, analiza y sé tú mismo el actor en tu vida, que en todos lados del mundo hay lo mismo, lo único que cambia es lo que tú piensas; la sociedad te querrá encasillar en algo, te exigirá conformidad a costa “incluso” de tu libertad individual, si no te explota el patrón, te explota el Estado y si les sigues te puedes convertir en un paria.

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(...) si en alguien debes confiar es solo en ti mismo y desde ahí hacer lo que más convenga a la verdad (...) y a la justicia.

Las leyes siempre fueron injustas, algunas incluso se han ido contra el sentido común o la justicia. Cristo fue inmolado en la cruz por los fariseos; a Sócrates se le obligó a beber la cicuta por ser un irreverente e iconoclasta, a Gandhi, a Martin Luther King los mataron disidentes; Hitler, Mussolini, Stalin llevaron a sus pueblos al genocidio injustamente, muchos hombres fueron esclavizados por el color de su piel o su raza. No todas las leyes que proclama la sociedad son buenas, como los derechos humanos que protegen a los delincuentes que matan y no luchan por leyes que protejan a las víctimas inocentes que no tienen cómo defenderse.

Universo de libros: obras para cultivar tu amor propio

En la vida se debe luchar por el bien común y la verdadera justicia que sea aceptada por la razón y el sano y verdadero juicio, si en alguien debes confiar es solo en ti mismo y desde ahí hacer lo que más convenga a la verdad, a la sociedad y a la justicia. (O)

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Hugo Alexander Cajas Salvatierra, doctor en medicina y comunicador social, Milagro