Falta una buena limpia en Barcelona. Varios jugadores ya cumplieron su ciclo, por el bajo nivel demostrado en la cancha. También, el equipo del astillero necesita un director técnico ganador; no basta con empatar ni irse a los penales (que el errático Díaz se encargó de patearlo mal, siendo un futbolista profesional, experimentado, mereciendo las críticas de la fanaticada amarilla en Sauces y Alborada, que miraban el partido en pantalla gigante). En cualquier parte, un penal bien pateado es gol y la final hubiera cambiado radicalmente. No podemos olvidar la clase y calidad del “artista” Víctor Ephanor, infalible en el cobro de tiros penales.

Muy dolidos los barcelonistas por la pérdida de la corona. Esperamos que el directivo Carlos Alejandro Alfaro Moreno aplique los correctivos pertinentes en la plantilla de jugadores y el nuevo director técnico sea un ganador. Felicitaciones al Papá Aucas, un justo campeón. Con paciencia esperaron 77 años para lograr la primera corona nacional, con sobra de merecimientos.

La fanaticada de Aucas y Barcelona esperan una buena campaña en la Copa Libertadores de América, y que hagan quedar bien al país.

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Finalmente, vaya nuestro aliento a la Tricolor en el Mundial de Qatar, a cuya selección anfitriona enfrentaremos este domingo 20. Muchos éxitos a los jóvenes futbolistas. ¡Sí se puede! (O)

Johnny R. Cedeño Miranda, periodista, Guayaquil