Son las 20:00 del miércoles 5 de mayo y Sebastián Ricardo Rivas cumple ocho meses. A su casa llega un arreglo de globos azules con uno en el que se destaca el dibujo de un diente. Jennifer Herrera, la mamá del pequeño, limpia con alcohol cada elemento mientras el padre sostiene desde lejos al bebé, uno de los 275.662 niños que nacieron y están creciendo en confinamiento por la pandemia en Ecuador.