La calle Guayaquil, del barrio La Fortuna, fue uno de los escenarios en los que el nivel del agua alcanzó más de un metro de altura en la parroquia Posorja, perteneciente al cantón Guayaquil.

En varios predios de este sector, en la mañana de este martes, 20 de febrero, moradores continuaban retirando enseres y evacuando el agua lodosa con baldes y escobas.

La noche del lunes 19 y madrugada de este martes, en medio de una intensa lluvia, el nivel del agua de un estero cercano alcanzó su tope y el agua se acumuló en el sector. El líquido llegó a cubrir más de metro y medio, según contaron vecinos.

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El agua superó el nivel de los muros colocados en los accesos de los predios. Estos habían sido ubicados en años anteriores debido a que en inviernos pasados ya se habían registrado inundaciones, aunque de menores proporciones.

Esta mañana, entre moradores del sector trataban de ayudarse para rescatar enseres y limpiarlos a fin de conocer en qué estado quedaron.

Una moradora de esa zona, Martha Solórzano, contó que el agua alcanzó hasta la altura del cuello, por lo que no pudieron rescatar ningún artículo, incluso útiles escolares de sus dos hijos de mojaron. Cuadernos y libros flotaron en el agua y se perdieron en medio de la inundación.

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“Todas las cosas se nos cayeron, la nevera flotando, se nos subió bastante el agua, se mojaron todas las cosas”, contó la ciudadana, quien reside cerca del estero El Chorrillo.

Otro vecino, Orlando Castro, usaba una manguera para remover agua lodosa que había mojado enseres, muebles y también mochilas de sus hijos.

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Barrio La Fortuna de Posorja quedó bajo el agua durante las intensas lluvias. Foto: Carlos Barros/El Universo. Foto: El Universo

En su vivienda, varios familiares trabajaban para sacar el agua lodosa que ingresó hasta cubrir casi la mitad de altura de un mesón, sobrepasando un muro elevado colocado en el ingreso a la vivienda.

“Primera vez en mi vida que me he llenado de agua hasta el pecho”, dijo.

El morador, que reside 22 años en la zona, consideró que las autoridades deberían revisar los conductos de alcantarillado en ese barrio y en una zona cercana de la antigua Marina para evaluar la evacuación de aguas lluvias.

“No tenemos dónde dormir más luego”, agregó y dijo que buscaba un sitio con algún familiar que reside en una zona alta de la parroquia.

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Barrio La Fortuna, en Posorja, uno de los más afectados por lluvia.

Publicado por El Universo en Martes, 20 de febrero de 2024

En ese sector, dos cables de tendido eléctrico cayeron a la mitad de la vía, por lo que moradores cerraron el paso con restos de planchas de zinc para evitar emergencias.

En otra vivienda, una adulta mayor, Severina Pibaque, dijo que posterior a las 06:30 se dio la evacuación del agua por las alcantarillas que, aparentemente, se habían taponado.

“Se subió rápidamente y no dio tiempo para alzar las cosas”, lamentó la mujer, quien se ayudaba con otros familiares para limpiar enseres.

Entre vecinos pidieron la limpieza del estero cercano y además alcantarillas que resultaron afectadas por el arrastre de material y lodo.

En el sector de Cristo Vive 1, otro barrio de Posorja, la adulta mayor Esmeraldas Chilán se despertó con el susto del ingreso de agua a las 03:00.

Ello derivó en complicaciones, porque el líquido atravesó su vivienda de madera, en donde residen un hijo con discapacidad, otra hija y dos nietos.

En el barrio Las Acacias, en Data de Posorja se registraron afectaciones. Foto. Carlos Barros/El Universo. Foto: El Universo

Esta mañana, esa vivienda se mantenía con lodo. La afectada aguardaba por la llegada de ayuda. “Como sufro de la presión, yo temblaba; el agua corría, gracias a Dios no se llevó la casa”, agregó.

En su vivienda hubo un pequeño desprendimiento de tierra en un área cercana a un brazo de estero que cruza la zona.

Este cuerpo de agua incrementó su caudal y afectó a otros predios vecinos de ese mismo barrio.

En la ruta a Playas, en Data de Posorja, en el barrio Las Acacias también el panorama era desolador este martes.

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Los vecinos limpiaban y retiraban artículos para colocarlos en los patios. Colchones, muebles e imágenes religiosas fueron puestos en los exteriores.

Algunos vecinos clamaron por comida a delegados municipales que se acercaron a realizar un recorrido para constatar los daños y proporcionar ayuda.

Varios equipos del cabildo recorrían algunos de los sectores afectados durante esta mañana. (I)