Nada se da gratis si no es a cambio de algo. Eso pasa con el préstamo de dinero que China le hará al Ecuador, lo cual se lo ha mencionado como algo positivo.
No soy técnico en estos asuntos, pero como un ecuatoriano más pobre, que anda en buseta y vive de cada quincena de su trabajo, pienso que algo interesante sacarán de ventaja a su favor sobre nosotros los chinos. En vez de hacer préstamos a otros países incentiven la producción nacional para que todos tengamos trabajo, mejoremos la calidad de los productos y servicios, y salgamos adelante con sello ecuatoriano.
Pablo Ramírez,
Quevedo, Los Ríos