Las respuestas dadas por el pueblo ecuatoriano contra el arbitraje internacional y trabajo por horas hacen temer que se mantengan los magros niveles de inversión extranjera directa (IED) y del trabajo formal. Ambas situaciones son resultado de combinaciones de múltiples problemas, cuyas soluciones nos llaman a atacarlos de manera diferente.

Durante todo el 2023 Ecuador logró captar apenas 372 millones de dólares de IED, 58 % menos que el 2022, según reporte del Banco Central del Ecuador (BCE). Mientras, en el 2023 los flujos de IED captados por los países de América Latina y el Caribe se mantuvieron en los 209.000 millones de dólares alcanzados en el 2022 (Monitor de Tendencias Globales de Inversión de la UNCTAD, 17 de enero del 2024). Por otra parte, el empleo informal sigue muy cerca de sus máximos históricos. Su tendencia sigue un curso creciente desde junio del 2014 (38,9 %), colocándose a Marzo pasado en 55,4 %.

Albino y el gas natural del golfo

¿Cómo atacar ambos problemas en el Ecuador de hoy? Pensando diferente acerca de la forma de iniciar el ataque. Primero, se deben evaluar desafíos y oportunidades por aglomerado (cluster) o cadena productiva. Así es como ha funcionado antes. La historia económica del Ecuador es una sucesión de exitosos desempeños de aglomerados y/o encadenamientos productivos, que fueron emergiendo para bien de la economía: cacao, balsa, banano, café, petróleo, flores, camarón, etc. Salvo el caso del petróleo, los restantes casos han sido resultado del emprendimiento privado como motor del éxito alcanzado, siempre ante entornos adversos.

Más allá de riesgos e incertidumbres, en cada aglomerado o cadena productiva se debe identificar los hitos que gatillarían la mejora competitiva y el crecimiento, la inversión y el empleo. Estos hitos están a la espera de ser descubiertos y/o liderados por emprendedores ingeniosos para ser convertidos en riqueza. Permanecen entre el desempeño actual de los factores de producción que alimentan cada cadena, de sus actuales demandas del mercado, de la condición competitiva de sus proveedores y el nivel de rivalidad existente entre los competidores.

Construir soluciones

Es la hora de emprendedores y empresas de los sectores con potencial de mejora competitiva y crecimiento. De aquellos que son capaces de idear con lucidez el éxito de su aglomerado o cadena productiva, evitando enfocarse en pedirle al Estado que genere o decrete el desarrollo.

Que las contrapartes estatales, a través de políticas públicas enfocadas en las necesidades de la mejora competitiva de los sectores de oportunidad, emitan las señales adecuadas para que el riesgo país siga bajando. Que esto ayude a lograr cuanto antes financiamiento multilateral para acelerar la inversión pública que más impacte en las mejoras sectoriales buscadas y aumente la capacidad de gasto de los hogares ecuatorianos. Así se provocaría un empuje inicial, para que una renovada colaboración pública privada sea fecunda en nuevos éxitos sectoriales. Que la solución a la crisis económica nacional sea impulsada por la suma de estos. (O)