El compromiso con el Ecuador, la calidad y la responsabilidad social son pilares fundamentales de su éxito a lo largo de sus 35 años de experiencia. Así define su gerente general, José Solines Aguayo, la visión y proyectos de una de las compañías más representativas del sector de la construcción ecuatoriana.
¿Cuándo se inició Solines Soluciones y cómo ha evolucionado la compañía desde entonces?
Solines Soluciones se fundó en 1991, comenzando como una empresa constructora sólida. Sin embargo, a lo largo de los años hemos diversificado nuestros servicios, incorporando un estudio jurídico, así como una línea inmobiliaria, consolidando lo que hoy es un grupo empresarial. Además, el grupo ha tenido presencia internacional desde 1981, cuando iniciamos con la importación y exportación de materiales preciosos como oro y plata.
En la actualidad nos hemos aventurado en la exportación de productos agroindustriales, como tubérculos (especialmente yuca), frutos rojos deshidratados, y más. Este camino nos ha llevado a abrir nuevas oportunidades, siendo Solines Soluciones un motor importante de empleo y crecimiento económico. Este año, 2025, hemos comenzado a operar con fuerza renovada, con un enfoque claro en contribuir al desarrollo del país.
¿Qué rol juega la empresa en la economía ecuatoriana y cuál es su misión en este contexto?
Nuestro principal objetivo como empresa es generar empleo y fortalecer la economía nacional. Ecuador atraviesa un momento complejo, pero también tiene un gran potencial, sobre todo en su gente. Como empresarios, debemos comprometernos a invertir en el país, a generar valor aquí y no desviar capitales hacia otros destinos. Si las inversiones se quedan en Ecuador, podemos avanzar hacia una mejora en infraestructura, seguridad, educación y servicios públicos, tal como lo han logrado otros países que han apostado por su propio desarrollo. La misión del Grupo Solines es justamente ser parte de esa transformación, contribuyendo al crecimiento económico del país y generando empleos que mejoren la calidad de vida de las familias ecuatorianas.
¿Cómo ve el futuro del país y qué cambios considera necesarios para alcanzar un mayor desarrollo?
Soy optimista respecto al futuro del Ecuador. Con el liderazgo adecuado, un gobierno que promueva la integridad y la justicia, y la participación activa de los empresarios, veo un 2025 y los años siguientes como una etapa de crecimiento para el país. Ecuador tiene todas las herramientas para ser una nación de primer nivel en América Latina, y si logramos mantener la inversión interna, el futuro puede ser brillante. Es fundamental que los empresarios sigamos apostando por el país, pagando impuestos, siendo honestos e íntegros en nuestros negocios. Creo que, con esfuerzo y voluntad, en cinco o diez años podríamos tener un país similar a Singapur en términos de desarrollo y calidad de vida.
¿Qué proyectos están desarrollando en Solines Soluciones y qué características diferencian sus obras?
En este momento estamos enfocados en varios proyectos clave, tanto en la península de Santa Elena como en Samborondón. Uno de los más destacados es el Samborondón City Center, un centro comercial con un área de oficinas y una torre multifuncional. Además, tenemos en desarrollo Al Sol 1 y Al Sol 2, que incluyen 300 unidades de terrenos y viviendas. En la misma línea tenemos en marcha San Bernardo 4, que ofrecerá departamentos con áreas sociales y deportivas de alta calidad, en una ubicación privilegiada junto al río.
Además, Mocoli Bay posee un parque central y tiene una vista privilegiada para sus residentes. Nuestro enfoque está en construir proyectos funcionales y atractivos. Consideramos que, dada la situación económica tanto local como global, es esencial ofrecer viviendas y espacios comerciales que sean accesibles, de calidad y adaptados a las necesidades de nuestros clientes. También tenemos ofibodegas con áreas comunitarias, cafeterías y otros servicios, lo cual facilita la vida de los propietarios y visitantes.
En la península de Santa Elena estamos desarrollando Sol & Mare, que incluirá departamentos de dos y tres dormitorios, con modernas áreas sociales y una ubicación ideal cerca de la costa. Y en la misma zona tenemos Vizcaya 2, que será un desarrollo con precios muy accesibles, excelentes áreas comunes y un entorno seguro y de alta plusvalía. Además, dentro de nuestros planes está la construcción de un museo cultural y de arte, que será el primero de su tipo en Samborondón. Esto, además de ser un hito cultural, también tiene un enfoque en sustentabilidad, contribuyendo a la preservación del medioambiente para las futuras generaciones.
¿Cuál es la visión de la empresa a largo plazo y cómo se alinean sus proyectos con el desarrollo sustentable?
Nuestra visión a largo plazo es ser un referente en el sector de la construcción y la inmobiliaria, no solo por la calidad, sino también por el impacto positivo que tenemos en la sociedad y en el medioambiente. Todos nuestros desarrollos están diseñados con un enfoque de sustentabilidad, con el compromiso de generar un futuro mejor para nuestros hijos, nietos y las generaciones venideras.
Creemos firmemente que las empresas deben ser responsables no solo en términos económicos, sino también en su impacto ambiental y social. Es por eso que en todos nuestros proyectos aplicamos principios de sostenibilidad, garantizando que cada obra que entreguemos sea un aporte a la construcción de un Ecuador más verde y próspero.
“Para el desarrollo de la comunidad de Samborondón, las autoridades municipales son de suma importancia en torno a la garantía para la inversión. La experiencia no es un accidente, cumpliremos 35 años brindando seguridad y estabilidad a los que confían en el Grupo Solines”
José Solines Aguayo, gerente general de Grupo Solines