En un osado intento para no perder mercados y, de esa manera, seguir evadiendo las sanciones, la flota fantasma de Rusia inició un recorrido arriesgado: desafiar el Ártico.
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“Movimientos extraños” estaría haciendo el Buran. Navega repetidamente de norte a sur, lo que hace pensar que no encuentra un paso transitable.
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En un osado intento para no perder mercados y, de esa manera, seguir evadiendo las sanciones, la flota fantasma de Rusia inició un recorrido arriesgado: desafiar el Ártico.