PAra presentar un espectáculo al público tenían que contratar a los artista y recibirlos en el aeropuerto de Guayaquil, sellar los boletos para el show, cobrar y hasta cuidar de que estuviera limpio el local donde se iba a hacer la presentación. De eso han pasado 50 años y lo que nació como la iniciativa de cuatro damas guayaquileñas amantes de la cultura, con el paso de los años se convirtió en una importante plataforma cultural que entrega su aporte al público desde su casa, el Teatro Centro de Arte (TCA), inaugurado en 1988.