Daniel León sacó la caja de mascarillas que había embalado y guardado desde junio de 2023 en su casa. En ese año se contagió de coronavirus luego de un viaje que realizó a Colombia. Desde que adquirió la enfermedad no había presentado mayor sintomatología respiratoria hasta el 31 de diciembre pasado.
Ese día empezó con tos seca que vino acompañada de malestar general y alta temperatura. Entre el 1 y 2 de enero se quedó en casa, descansando y bebiendo infusiones, pero el pasado viernes su cuadro se agudizó y tuvo que asistir de urgencias a un centro médico privado ubicado en la avenida Juan Tanca Marengo, norte de Guayaquil, para recibir atención.
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“Me explotaba la cabeza y tuve escalofríos, no dejé de toser, pero ahora ya tenía flema y me dolía muchísimo la garganta”, dijo este sábado, 4 de enero, al acudir —nuevamente— hasta el establecimiento médico para el seguimiento.
Así como él, Magdalena Galarza se movilizó desde la 11.ª etapa de la Alborada hasta un centro de atención médica en la avenida Rodolfo Baquerizo Nazur, también en el norte de la urbe. Al regresar de su estancia en Salinas, la joven, de 27 años, amaneció este sábado con fiebre y picazón en la garganta.
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“Desde el 31 de diciembre hasta el jueves (2 de enero) estuve bien. Me ardía un poco la garganta, pero no le presté mucha atención. Ayer en la tarde salí y me cayó un poco de lluvia y hoy amanecí sin voz y con mucho dolor y picazón en la garganta”, contó.
En el establecimiento de salud privado al que acudió le solicitaron un screening respiratorio, esto es un hisopado que permite detectar si la persona padece alguna variante de influenza o COVID-19.
Galarza recibió al mediodía del sábado los resultados de los exámenes y, aunque descartó dichas enfermedades, fue diagnosticada con rinofaringitis aguda.
Estos tipos de cuadros se han incrementado desde el 26 de diciembre y han tenido su pico desde el 2 de enero, tras las celebraciones de fin de año, señalan trabajadores y médicos de centros de salud privados ubicados en la Kennedy, la Alborada y La Garzota. En las centrales médicas también se registra un repunte de personas que buscan colocarse sueros de vitaminas.
Este sábado, 4 de enero, las salas de espera de los establecimientos de salud albergaban a pacientes con mascarillas. Algunos de ellos esperaban resultados de exámenes o estaban ahí por consultas.
La central de Medikal, ubicada en La Garzota, concentró a usuarios con cuadros respiratorios y aquellos que buscan colocarse sueros de vitamina C o complejo B para prevenir el contagio de enfermedades o para reforzar el sistema inmune.
“No aguantaba la tos y tuve que venir rápido para hacerme atender”, dijo una usuaria que llegó hasta esta sede que brinda atención médica ambulatoria desde hace 17 años en la ciudad.
El médico Bruno Figueroa, quien labora en Medikal, indicó que los casos de faringitis, rinofaringitis y amigdalitis bacteriana se elevaron en los últimos quince días, al igual que las enfermedades gastrointestinales.
“Era de esperarse este cuadro, ya que siempre hay un repunte de pacientes luego de los feriados. Además, esto se ha unido a los cambios de clima, pasamos de un estado seco o de verano a uno invernal, este cambio deriva en un aumento de casos a nivel de sintomatología respiratoria”, señaló Figueroa.
El galeno manifestó que hasta el establecimiento de salud han llegado más pacientes desde que se inició el 2025, luego del cierre del año.
Figueroa mencionó que al presentar fiebre, dolor de garganta, secreción o algún síntoma que afecte la actividad respiratoria se debe acudir hasta un centro de salud y evitar automedicarse. Asimismo, por prevención, usar mascarilla y priorizar el lavado de manos, ya que se han registrado casos de contagio dentro de un mismo círculo familiar.
Por el incremento de la demanda de atenciones para tratar enfermedades respiratorias, los centros privados de salud ambulatorios han optado por hacer recomendaciones a los usuarios a través de sus redes sociales.
Uno de los grupos médicos con sedes en zonas del norte y sur de la ciudad ofrece consultas médicas presenciales o en línea, junto con la colocación de sueros de vitamina C. La aplicación de sueros de vitaminas C y B se cotizan desde los $ 10 con la receta del médico tratante. (I)
