Si bien en algún momento la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de las calles José Mascote y García Goyena se ‘blindó' restringiendo el acceso de vehículos por el sector y colocando sacos de arena en la puerta principal, para evitar atentados de grupos criminales en un contexto en el que aquello se volvió recurrente, hoy dicha sede es el sitio de encuentro de la comunidad.