Usa a diario la línea 65 para movilizarse de su casa, en la parroquia Febres Cordero, suroeste, a Los Ceibos, noroeste, donde trabaja. Toma el bus en la calle Portete y desde hace más de un año ve que “no avanza” la troncal 4 de la Metrovía, el sistema de transportación masiva de Guayaquil que ahora unirá al suburbio con el centro de Guayaquil.