El carnaval se acerca y muchas personas optan por permanecer en Guayaquil. A la falta de un presupuesto, hay familias que en los barrios sacan sus piscinas inflables y las instalan en los exteriores de sus casas.

Durante los últimos años eso se estaba restringiendo debido a que muchas de esas piscinas se montaban en las aceras y hasta en las calles.

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Esta mañana, en su enlace radial, el alcalde Aquiles Alvarez fue consultado sobre este tema. El personero municipal comentó lo siguiente: “La verdad, a veces, es mejor hacerse el loco. La gente también tiene que disfrutar, sin dejar que se convierta en anarquía. Pero con tanto problema que hay y sin plata...”, sostuvo.

Alvarez dijo que habrá personal desplegado para los controles. Casi 1.400 agentes estarán desplegados en este feriado.

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Además se han planeado actividades en los malecones y los parques de agua. (I)