‘Llegó de emergencia, no había tomógrafo, tuvieron que llevarlo al Guasmo y luego regresarlo’: en el Hospital Guayaquil se denuncia falta de equipos y mala atención a familiares

Juan Carlos tenía 21 años. La noche del lunes, 1 de abril, sufrió un accidente en una motocicleta en Vinces, provincia de Los Ríos. Una ambulancia de inmediato lo trajo al hospital de tercer nivel que tiene el Ministerio de Salud Pública (MSP), el Abel Gilbert Pontón, más conocido como Guayaquil, ubicado en el suburbio del Puerto Principal.

Allí se percataron de que necesitaba una tomografía urgente, pero el tomógrafo del hospital no estaba operativo, por lo que fue necesario llevarlo de inmediato al hospital del Guasmo para que se le pueda aplicar este examen y poder tener un diagnóstico acertado de los golpes y los traumas craneoencefálicos que este paciente tenía.

Así lo contó su esposa, quien estuvo por cuatro días en los exteriores de este hospital ubicado en las calles 29 y O’Connors.

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Este hospital al ser un centro de tercer nivel recibe a los enfermos más críticos derivados no solo de la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón), también pacientes catastróficos de otras provincias.

Tiene más de 26 especialidades médicas, incluidos servicios de oncología, quimioterapia y cirugía oncológica que no cuenta otro hospital del MSP en Guayaquil.

Al igual que otros hospitales de la red pública, el Hospital Guayaquil está en un promedio de más del 80 % de abastecimiento en medicinas e insumos médicos, como lo mencionó el ministro de Salud, Franklin Encalada, la semana anterior.

Pero a pesar de aquello, hay quejas en los usuarios que dicen que en algunas casas de salud les envían a comprar medicinas e insumos aduciendo que no tienen en stock.

“Llegó de emergencia aquí, no había tomógrafo, tuvieron que llevarlo al hospital del Guasmo y luego regresarlo en la condición que está. Tuve que decirle a la ambulancia que lo trajo de Vinces para que pueda llevarlo al Guasmo”, lamentó la mujer en el caso del Abel Gilbert Pontón.

Añadió que tuvo que gastar al menos $ 70 diarios en diversos medicamentos que su esposo necesitaba y batallar con el hecho de que no brindaban información a los familiares.

“Él fue llevado hacia la unidad de cuidados intensivos por lesiones en la cabeza, él habló conmigo hasta antes que lo ingrese, él estaba consciente, solo me decía que le dolía la cabeza, pero falleció”, relató la mujer al recordar esas últimas palabras que logró conversar con él antes de su intubación.

Sobre la situación del tomógrafo en el Hospital Guayaquil la cartera de Salud informó que el equipo se encuentra en reparación.

La ahora viuda comentó que le dijeron que tuvo muerte craneoencefálica y que utilizaron como donante de órgano. “Mi esposo era joven, 21 años, él habló conmigo antes de que lo intubaran, siento que si la atención hubiese sido más ágil, hubiese sido distinto”, lamentó la mujer.

Ese sentir lo llevan decenas de familiares de pacientes del hospital ya sea por falta de equipos, medicamentos, insumos o porque no se le brinda a tiempo la información de su familiar.

Decenas de personas que esperan en las diversas puertas de este sanatorio tanto la de consulta externa, como el área de emergencia y también el área de ingresos de hospitalizaciones coinciden en que es necesario que se mejore la atención.

“Estamos aquí aguantando sol todo el día a la espera de información de nuestro familiar, ni una carpita, una esquinita para estar sentados”, cuestionó Washington, uno de los familiares.

Vanessa Bonilla, esposa de un conductor que recibió una bala en el maxilar en el cantón Pedro Carbo, y fue llevado de emergencia a ese hospital contó: “Ya estoy seis días aquí y aún no le retiran la bala, que no hay el especialista”.

El hospital Abel Gilbert informó que este paciente sí recibió la atención oportuna y que aún no se le retira el proyectil porque se está esperando a que el proceso del trauma disminuya.

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La tarde de este miércoles, 10 de abril, Lupe Cedeño, moradora del suburbio de Guayaquil, refirió que no la dejaban ingresar a ver a su hermana que se cayó y tuvo una fractura.

“A mi hermano le dijeron que tenía que sacar carné, al día siguiente me dicen que ese servicio es en el Guasmo, no aquí, estoy confundida”, expuso la mujer que acudió a cuidar a su hermana que está hospitalizada en el área de Traumatología debido a una fractura de cadera por una caída.

Ella señaló que no le han pedido tantos insumos solo los pañales que ella necesita a diario, sin embargo, lo que le incomoda es ver el área de los baños en ocasiones sucia.

“Un día limpian y otro no, así no se puede, además como es área de traumatología, a los pacientes no los limpian rápido, están con sus necesidades, eso sí no me gusta”, indicó la mujer. (I)