La presencia de maleza, basura y el olor a orina se replica en diferentes puntos de Guayaquil en donde hay solares vacíos y en abandono.
En toda la esquina de las calles Colón y García Moreno, en el centro de la urbe, por ejemplo, ha sido recurrente el pedido por parte de moradores hacia las autoridades para que se encarguen de este espacio que se ha convertido en guarida de hacheros, chamberos e indigentes.
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A este solar, además, no solo llegan las personas sin hogar, sino que conductores que transitan por el lugar lo han tomado como urinario público.
El Municipio sí ha llegado al sitio, dice el dueño de un local que queda diagonal al solar. En las paredes están pegados los papeles que se colocan cuando se detecta desaseo en un área. Uno de estos últimos avisos se puso el mes pasado.
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Sin embargo, el problema no se ha solucionado ya que la presencia de basura y de indigentes continúa y ha sido frecuente en los últimos diez años. En enero, el Municipio ya abrió un expediente por desaseo a los propietarios del predio.
Un panorama similar hay en Bellavista, Mucho Lote 1 y Lomas de Urdesa. En los predios de estos sectores del norte de la urbe, la maleza sobrepasa el metro de altura y la poca iluminación que hay en los sectores ha propiciado robos y asaltos.
Los moradores de Lomas de Urdesa señalan que los delincuentes se suelen esconder entre la maleza. El norte de la ciudad es uno de los sectores en los que más se ha encontrado esta novedad.
En marzo pasado, dentro de la campaña Guayaquil Limpia y Ordenada que se ejecutó en la administración de Cynthia Viteri, en Bellavista se habían identificado 31 solares en estado de abandono y desaseo.
“Lo que se requiere es que no solo haya una notificación. Si no hay respuesta de los dueños, pues que el Municipio intervenga para no estar con el miedo de que nos pueda pasar algo”, dijo Óscar Ruiz, morador de Urdesa.
El Municipio indicó que hasta inicios de agosto se registra un aproximado de 45 denuncias reportadas por abandono de predios en todo Guayaquil.
Estos predios abandonados y en desaseo han sido notificados al cabildo, porque los moradores han mencionado que son refugio de personas en condición de calle, delincuentes y consumidores de drogas, también se los utiliza como depósito de basura y se realizan reuniones de pandillas del sector.
Mario Tamayo, director de Justicia y Vigilancia, dijo que desde que asumió la nueva administración en mayo hasta inicios de agosto, son 111 predios sellados e identificados en abandono y desaseo en diferentes puntos de la urbe.
Los propietarios de estas áreas en abandono, indicó Tamayo, son sancionados de acuerdo con el proceso establecido en el Código Orgánico Administrativo y en la Ordenanza de Uso de Espacio y Vía Pública.
La colocación de sellos es una medida preventiva que da inicio a un proceso administrativo sancionador donde las multas pueden ir de $ 500 a $ 5.000 de acuerdo a las dimensiones del predio y el sector en donde se encuentre ubicado.
Tamayo dijo que si existe reincidencia por parte de los propietarios de estos predios notificados se les genera un juicio de coactiva por las multas no canceladas y que pueden derivar hasta el embargo del predio. (I)