Por estos días el edificio Fantasía se ha convertido en un vecino peligroso para quienes viven, transitan o tienen negocios en la avenida 9 de Octubre, entre las calles Esmeraldas y José Mascote, centro de Guayaquil, debido al hundimiento e inclinación de al menos 40 centímetros que tiene la estructura de medio siglo de antigüedad y 14 pisos.