Yanina Rodríguez llegó con sus dos hijos el fin de semana al parque Forestal, en el sur de Guayaquil. Más les tomó el tiempo de salir desde su casa en el Guasmo sur hasta el sitio que quedarse en el parque ya que solo estuvieron unos minutos y se retiraron porque al atardecer, con el viento que remecía las ramas de los árboles, el ambiente se llenó de una especie de “pelusa blanca”.