Técnicos de la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) clausuraron dos farmacias en Guayaquil por presunta distribución de medicamentos sustraídos y falsificados.

Las irregularidades se detectaron tras una denuncia por robo de productos farmacéuticos emitida por la industria y recibida por Arcsa.

Personal de la entidad inspeccionó farmacias ubicadas en el sur de Guayaquil y en una de ellas descubrió una bodega oculta en la que se almacenaban varios medicamentos de presunta procedencia ilegal.

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Durante la inspección se identificaron varias irregularidades que evidencian un posible esquema de falsificación y comercialización ilícita de medicamentos robados.

Los técnicos encontraron 11.825 unidades de probióticos y 17.453 etiquetas que presuntamente se utilizarían para falsificar fármacos.

Además se detectaron miles de sobres de suero oral, cuya venta estaba prohibida, ya que presuntamente habrían sido sustraídos de los canales oficiales de distribución.

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En otra farmacia aledaña se hallaron más productos de origen irregular, posiblemente del contrabando.

Arcsa solicitó la intervención inmediata de la Policía Judicial, cuyos agentes confirmaron las irregularidades y procedieron con la detención de los presuntos responsables del almacenamiento y distribución de estos productos ilícitos.

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La entidad ordenó la clausura temporal de los establecimientos hasta que los propietarios presenten la documentación que justifique la procedencia y legalidad de los productos decomisados. (I)