“¿Ya sabe cuándo volverán a dar los almuerzos?”, “¿puede ver si ya hay los pañales?”, “¿cuándo vuelven a atender?”. Son varias de las interrogantes y pedidos que día a día hacen decenas de personas que llegan hasta la Casa Rosada, inmueble municipal pintado de rosado en la avenida de la Democracia, en La Atarazana, norte de Guayaquil.