Parte de la historia de Guayaquil se refleja en sus calles, en parques, plazas, museos y edificios de los diferentes sectores. Ciudad libérrima, de ritmo acelerado y crecimiento un tanto desordenado, desde la perspectiva de la planificación urbana, guarda reliquias invaluables, quizás descuidadas y desconocidas por muchos, pero que dan testimonio de cómo fue y evolucionó el Puerto Principal del Ecuador.