Aprovecho los sesenta años del colegio Alemán Humboldt para realizar un par de reflexiones sobre la educación en el país. A luz de las manifestaciones del mes pasado, la educación es un tema que vuelve a estar en boca de mundo y medio. No es de extrañarse: el Ecuador vive en una crisis permanente desde que yo recuerdo. La solución a través de la educación vuelve a ser aquella manida fórmula que puede llegar a cansar por lo insistente e insustancial. Sí, la educación… ¿pero cómo y para qué? Parecería que plantear soluciones semejantes se ha convertido hoy en la excusa perfecta para no proponer nada concreto y dejarlo todo en manos de la utopía, la utopía educativa.