C. Hernández de 75 años de edad sufre del mal de Parkinson y cada semana viaja desde Esmeraldas a Guayaquil para recibir las terapias que le ayuden a reducir los síntomas de su enfermedad. Según cuenta la asegurada, esto ha mejorado su calidad de vida ya que logra mejor coordinación de sus movimientos. “Tomar la medicación como prescribe el médico, las terapias de rehabilitación y el apoyo familiar son importantes dentro del tratamiento”, mencionó la septuagenaria que recibe atención en la Clínica del Parkinson ubicada en el hospital del IESS de Los Ceibos.