La luz que pasa por las ventanas superiores del templo alumbra con suavidad la imagen colocada frente al altar. Se trata de un Cristo brillante con expresión pensativa, muy diferente al primero que tuvo la parroquia Cristo Rey en sus primeros años de fundación, en 1971. Norma Lindao, de 68 años, recuerda esa imagen que vio por primera vez hace 31 años, como “tosca y mucho más pequeña que ahora, pero igual de significativa para nosotros”.Este templo, ubicado en Colombia y la 39, mantiene una tradición de fe a Cristo Rey, cuya fiesta se celebra hoy con la procesión organizada por la Diócesis, desde 1926. El recorrido se iniciará a las 17:00, en la Catedral y llegará hasta el monumento del Sagrado Corazón de Jesús, Cerro del Carmen.La festividad de Cristo Rey empezó a nivel mundial en 1925, apoyada por el papa Pío XI para detener el avance del ateísmo en la sociedad. Esta fiesta era celebrada en octubre hasta que el Concilio Vaticano II, en 1962, dispuso que fuera en noviembre.La celebración tiene en Ecuador un contexto especial pues, según Ramiro Herrera, sacerdote en la iglesia Cristo Rey, fue “la forma en que el país manifestó nuevamente su fe después del periodo liberal”. Igual de extraordinaria es la manera en que se levantó la parroquia en honor a Cristo Rey.Los recuerdos de una capilla de caña de 6x4 metros en un barrio que era lodo y agua son claros para Zenobia Carranza. Ella, a sus 74 años, admite haberse apegado a la iglesia desde que empezó a construirse la estructura que aún prevalece y fue gestionada por el religioso alemán Longino Schmidth.“Yo era una negrita que nunca se quedaba quieta”, comenta Carranza mientras mira la calle desde la puerta de su hogar y trae a su memoria el tiempo en que iba al templo casi todos los días, hábito que abandonó hace tres años por un problema en un músculo que no le permite caminar bien.Carranza cambia su voz a un tono dulzón al hablar del inicio de la parroquia y mencionar en esa historia al padre Longino.Schmidth, perteneciente a la Misión del Verbo Divino, fue quien buscó el financiamiento para la edificación del templo, evangelizó a las familias del sector y constituyó las tradiciones que aún hoy celebra la comunidad para conmemorar a su patrono.Él es un hombre de 81 años, de caminar lento y escaso cabello blanco, que ahora es párroco de la iglesia Santa Marianita de Jesús, en el Guasmo. Este religioso demuestra sencillez cuando se refiere a sus obras, que las describe como “un compromiso con la iglesia”.Con su voz pausada y acento alemán que 54 años de misión en Latinoamérica no han borrado, Schmidth dice que “los ecuatorianos son extraordinarios en compartir, cosa que no se encuentra siempre en todos los pueblos”.“En la parroquia las personas siempre estuvieron dispuestas a ayudar”, recuerda, pues consciente de sus limitaciones les propuso colaborar donando un bloque, para la construcción del templo, iniciativa que la comunidad acogió con gusto.Sobre la procesión que inició en la parroquia no dice mucho pero reconoce que fue parte de la formación que dio a las personas del sector.Este recorrido, organizado por la comunidad, se desarrolló ayer, como resultado de la preparación espiritual de una novena que se inició el jueves 13.Los rezos y cánticos que hicieron en las diferentes calles de la parroquia repetían un patrón: ojos cerrados y manos juntas, cabezas agachadas y los susurros del Padrenuestro, el Avemaría o el Credo como parte del rito en adoración al Cristo que estaba en la gigantografía.Otra de las tradiciones que se mantienen desde hace 37 años es la fiesta que se realiza luego de la procesión. “Ahí tenemos seco de pollo, humitas y mucha comida”, explica Norma Lindao. “Pero antes había castillos, juegos pirotécnicos, vaca loca, es que al padre Richard le encantaba motivarnos”, dice ella recordando a un párroco que ahora predica en otro sector.Esta fiesta, que se efectuó ayer, constituye el preámbulo de la gran procesión de Cristo Rey que se cumple hoy en el centro de la urbe. Durante estos días también se acostumbra a colocar la imagen en los balcones y ventanas de los hogares. Cientos de ellos quedaron engalanados desde ayer.OpinionesLongino Schmidth Primer párroco de la iglesia Cristo Rey. “Mi trabajo fue encaminar a las personas en la fe y educarlas en la espiritualidad”.Irene Coronel Feligrés de la glesia Cristo Rey. “Nosotros pedimos porque ya no haya delincuencia ni maldad en esta época tan peligrosa”.","isAccessibleForFree":true}
Hoy es la fiesta de Cristo Rey y habrá una procesión. Una parroquia lleva su nombre en la ciudad.
La luz que pasa por las ventanas superiores del templo alumbra con suavidad la imagen colocada frente al altar. Se trata de un Cristo brillante con expresión pensativa, muy diferente al primero que tuvo la parroquia Cristo Rey en sus primeros años de fundación, en 1971.