El presidente Daniel Noboa decretó este viernes un nuevo estado de excepción a nivel nacional por 60 días, esta vez por causa de la grave crisis energética que atraviesa el país, con apagones de varias horas de duración al no poder atender la demanda nacional de electricidad.

Desde el domingo pasado se registran apagones diarios en diferentes zonas del país, al haberse quedado sin el nivel suficiente de agua el embalse de Mazar, el segundo más grande del país, que permite operar un complejo de tres centrales hidroeléctricas con una potencia de 1.757 megavatios, equivalente a alrededor de un tercio de la demanda nacional.

A través de un decreto, Noboa dispuso “la movilización e intervención de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas en todo el territorio nacional, debidamente coordinadas, para garantizar la seguridad de las instalaciones críticas de infraestructura energética para prevenir sabotajes, ataques terroristas u otras amenazas que puedan afectar a su funcionamiento”.

Publicidad

El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas del Ecuador difundió un video en el que se aprecia a uniformados custodiando las hidroeléctricas. “En el corazón de Ecuador, los proyectos hidroeléctricos no solo son esenciales para la sostenibilidad energética, sino también para la seguridad nacional”, se indica en un video publicado por la entidad.

Se detalla que personal militar altamente capacitado vigila estas infraestructuras críticas, asegurando su operación ininterrumpida y protección contra amenazas, a través de la supervisión constante y el uso de tecnología avanzada, “demostrando un compromiso inquebrantable con el progreso y la estabilidad de Ecuador”. (I)