La crisis energética que provoca cortes de luz diarios a nivel nacional también se ve agravada por el impacto al medioambiente debido a la intervención humana.

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Un reporte de la ONG Ecociencia sobre el impacto de la erosión regresiva del río Coca indica que la obra de captación de la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, que produce hasta 30 % de la energía eléctrica en Ecuador, está en riesgo de ser afectada por la propagación de la erosión regresiva en el río Coca.

La central está a solo 15,5 kilómetros río arriba de la cascada San Rafael, que tenia 146 metros de altura y desapareció en febrero de 2020. Una imagen de esta aparecía en el video del himno nacional como una de las joyas naturales del país, que quedó devastada por un torrente de piedras y tierra.

La central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair fue una de las obras que se realizó durante el régimen de Rafael Correa (2007-2017) a un costo de $ 3.000 millones de dólares. Es la más grande del país y fue construida por la empresa china Sinohydro.

Sin embargo, tiene fallas como las más de 70 mil fisuras registradas, según el ex ministro de Energía y Minas Fernando Santos Alvite durante el régimen de Guillermo Lasso (2021-2023).

“Cabe mencionar que los cambios en los regímenes de flujo y el equilibrio del transporte de sedimentos en el río Coca relacionados con la construcción y operación de esta presa podrían haber acelerado potencialmente el proceso que capturó el canal del río Coca y provocó la desaparición de la cascada San Rafael”, indica el informe de Ecociencia que recién podía hacerse público hoy lunes 22 de abril de 2024.

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Las laderas afectadas por la erosión regresiva. Foto: CORTESÍA

“En febrero de 2020, ocurrió un fenómeno misterioso: el colapso y desaparición de la cascada más grande del Ecuador, la cascada San Rafael en el río Coca. La abrupta eliminación de esta barrera natural en el río desató un proceso de erosión regresiva de una magnitud y proporción tan excepcional que se formó un nuevo cañón, y se ha cambiado completamente el curso del río y sus afluentes, eliminando estructura e infraestructura alrededor, y socavando el tramo del río aguas abajo con una inmensa cantidad de sedimentos”, añade el reporte.

Área estudiada donde la erosión destruye las laderas y el cauce del río Coca

Muestra de cómo la erosión acelera la destrucción del bosque nativo en las laderas del río Coca, un proceso que está en expansión. Foto: CORTESÍA

Los flujos de lava de la erupción del volcán Reventador “represaron el río con el monstruoso dique que formó la cascada de San Rafael”.

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“En términos de costo social, este proceso se ha llevado varias partes de los tres oleoductos, un tramo de la carretera, puentes, casas y estructuras, y todo lo demás dentro de su alcance. Mientras tanto, la erosión regresiva siga activa y aún está avanzando aguas arriba”, indica el reporte que incluye imágenes y mapas.

Otro impacto ecológico es la pérdida del bosque nativo a lo largo el río debido a estos procesos de erosión de las laderas con los nuevos continuos movimientos a lo largo del río Coca.

La Fundación Ecociencia realizó un proceso de monitoreo satelital para detectar y cuantificar la deforestación debido a la erosión regresiva a lo largo de este tramo del río Coca aguas abajo de la represa hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, ubicado al noreste de Ecuador, entre los Parques Nacionales Cayambe-Coca y Sumaco-Napo Galeras en las provincias de Napo y Sucumbíos.

Así era la cascada de San Rafael, que desapareció.

El objetivo es alertar a las autoridades y al público sobre la gravedad de esta situación inusual, dado que aún no se desarrollan técnicas que ayuden a mitigarlo.

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“La erosión regresiva es un fenómeno hidráulico de erosión fluvial, provocado por la fuerza del caudal sobre una variación en el sustrato que produce la incisión y profundización del cauce y la erosión lateral de las orillas en un proceso que arrastra material y sedimentos y se propaga aguas arriba hacia el tramo superior del río hasta que se establece un perfil longitudinal de equilibrio”, define el reporte.

El río Coca es parte de áreas protegidas del país como parques nacionales y reservas. Foto: CORTESÍA
Impacto del proceso de erosión cerca a la localidad de San Luis. Del 2020 al 2024 se determinó un total de 53,4 hectáreas de erosión regresiva solo en esta zona. Foto: CORTESÍA