El pedido de México de que ingresen dos aviones para trasladar a su entonces embajadora, Raquel Serur, sin especificar quiénes la acompañarían y teniendo conocimiento de que la funcionaria no tenía familia en el país, despertó las alarmas para el Gobierno ecuatoriano el 5 de abril y alentó la idea de que el exvicepresidente Jorge Glas se fugaría en esa aeronave. Ese mismo día, el país confirmó que le había concedido asilo político.

En el segundo día de audiencias ante la Corte Internacional de Justicia, el jurista Alfredo Crosato, parte de la defensa de Ecuador, relató que el pasado 5 de abril, México elevó su intención de sacar a Glas del país.

Ese mismo día dijo Crosato que México pidió la colaboración a Ecuador para ingresar con aeronaves para retirar a la embajadora y esto encendió las alertas de que el país le iba a facilitar la fuga.

Publicidad

“La tarde del 5 de abril a las cuatro de la tarde, Ecuador recibió un requerimiento de México para que dos aviones mexicanos aterricen el 7 de abril”, contó y dijo que no se explicó el objetivo de que sean dos ni se detalló el personal que iba a dejar el país.

Crosato subrayó que México nunca mencionó ese pedido en la audiencia del 30 de abril, en la que rechazó todo el accionar de Ecuador y cuestionó que el presidente Daniel Noboa haya dicho que tiene cero arrepentimiento sobre la decisión de ingresar a la embajada para detener a Glas.

Asimismo, el jurista explicó que ese mismo 5 de abril, una hora más tarde, a las cinco de la tarde, México hizo otro pedido. Esta vez para indicar que la embajadora Serur dejaría el país sola y en un vuelo comercial el 7 de abril.

Publicidad

Esos pedidos casi simultáneos alertaron aún más a Ecuador sobre una eventual fuga de Glas con ayuda de México.

Ecuador aseguró este miércoles ante la Corte que el ingreso a la Embajada de México en Quito, el 5 de abril, fue un “incidente aislado” que ocurrió en “circunstancias muy excepcionales”.

Publicidad

En la segunda jornada de audiencias orales por una demanda de México, el principal agente de Ecuador ante la CIJ, el diplomático Andrés Terán Parral, afirmó que “el incidente aislado del 5 de abril fue solamente eso. Tuvo lugar en circunstancias muy excepcionales”.

Estas audiencias respondieron a una demanda de medidas preventivas solicitadas por México a la CIJ a raíz del episodio.

En su ponencia ante la CIJ, Ecuador pidió a la corte que rechace la demanda mexicana de medidas provisorias.

México “no ha demostrado urgencia alguna para la indicación de medidas provisionales en el sentido de que no existe un riesgo real e inmediato de daño irreparable” a los derechos que busca proteger, dijo Terán Parral.

Publicidad

Por ello, “la República del Ecuador solicita a la corte que rechace la solicitud de indicación de medidas provisionales presentada por los Estados Unidos Mexicanos”, puntualizó.

En una declaración a la prensa al fin de la audiencia, Terán Parral dijo esperar que los argumentos presentados “sean tomados positivamente en consideración” por la CIJ.

Ecuador, añadió el diplomático, “aceptará y cumplirá la decisión que este organismo adopte, cualquiera que sea”. (I)