Cada vez que voy por las calles de Guayaquil es inevitable no encontrarme con un “ñengoso” por ahí. Se visten con colores muy llamativos y utilizan un lenguaje no muy agraciado. Para los jóvenes es una nueva moda.

Al escribir este término en el buscador de Google pude darme cuenta de la cantidad de información que hay sobre ellos. Se han popularizado varios videos en los que mandan saludos utilizando palabras y gestos obscenos. Con su forma de hablar es como si contaminaran el ambiente con cada palabra que dicen.

Esta nueva “tribu urbana” poco a poco va en aumento.

Se debe tomar en serio este asunto ¿o todavía se va a seguir haciendo burla de los famosos “ñengositos”? (O)

Kerly Patricia Guano Gutiérrez, estudiante, Guayaquil