En apelación, Jorge Glas se juega una nueva carta para alcanzar su prelibertad

Pese a que inicialmente fue declarado en abandono el recurso de apelación planteado por la defensa del expresidente Jorge Glas contra la negativa recibida a que se dé paso a la prelibertad que se solicitaba, para este viernes 23 de febrero se ha convocado a las 08:00 para la instalación de la diligencia en la que se resolverá la apelación contra la resolución dictada en materia de garantías penitenciarias.

El 28 de diciembre pasado la jueza Melissa Muñoz, de la Unidad de Garantías Penitenciarias de Pichincha, negó el pedido de prelibertad, porque no cumplió uno de los ocho requisitos previstos por la legislación para acceder a ese beneficio. En la evaluación de las actividades que debía cumplir dentro de los centros penitenciarios en los que estuvo se necesitaba una nota mínima de cinco puntos de un total de diez, que no logró.

De acuerdo con los reportes del Centro de Privación de Libertad (CPL) de Cotopaxi, de la Cárcel 4 de Quito y del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad (SNAI), en algunas áreas Glas registró calificaciones de 0 puntos porque no realizó ninguna actividad.

Jueza negó pedido de prelibertad al exvicepresidente Jorge Glas

Por ejemplo, se indicó que aunque se matriculó en una universidad a distancia para seguir una maestría, en un momento no cursaba ningún estudio, entre otros aspectos como no haber realizado actividades físicas. Por lo cual, la calificación global que obtuvo el exvicepresidente fue de 2,83 puntos sobre diez. No llegó a la nota mínima de 5 puntos.

En esa ocasión el exvicepresidente Glas siguió la audiencia de manera virtual desde la Embajada de México, en Quito, lugar al que ingresó el 17 de diciembre pasado para supuestamente salvaguardar su vida. Días después, el exvicepresidente en el gobierno de Rafael Correa solicitó asilo político al Gobierno mexicano y al momento se mantiene como “huésped”.

El abogado defensor de Glas, Édison Loaiza, apeló la decisión tomada por la jueza penitenciaria en la misma audiencia. Argumentó que su cliente cumplió el 40 % de la pena el 14 de diciembre de 2020 y estaba hábil para que se le conceda la prelibertad.

A Glas se le definió que debe cumplir aún dos años y once meses de la pena unificada que se le impuso, luego que una jueza de garantías penitenciarias decidió que la condena de ocho años en el caso Sobornos 2012-2016, por cohecho, absorbía a la pena de seis años de prisión dispuesta en el caso asociación ilícita Odebrecht. El exmandatario registra el 63,02 % de la condena cumplida.

Caso Reconstrucción de Manabí: Tribunal niega apelación y mantiene orden de prisión preventiva para Jorge Glas

Esta audiencia de apelación debió darse el 14 de febrero pasado, pero aquel día no se hicieron presentes ni Glas ni su abogado. El Tribunal de Alzada, integrado por los jueces Carlos Figueroa (ponente), Patricio Navarrete y Patlova Guerra, de la Corte Provincial de Justicia de Pichincha, declaró en abandono el recurso al no estar presentes ni el accionante ni su abogado.

Dos días después el Tribunal de Apelación resolvió revocar el decreto de abandono y, advirtiendo que es la última vez que se convoca para esta audiencia, se llamó para la diligencia este viernes. En la providencia emitida se hace conocer que la revocatoria llegó una vez que desde la defensa de Glas se entregaron los documentos médicos que justificaban la inasistencia.

La jueza Muñoz recordó que en la sentencia del juez de Santo Domingo de los Tsáchilas, Émerson Curipallo, de finales de noviembre de 2022, se le otorgaron a Glas unas medidas cautelares autónomas que incluyeron una “libertad provisional”, que estaría vigente hasta que se resuelva el pedido de prelibertad o un juez de garantías penitenciarias emita una decisión contraria.

Como el recurso de prelibertad le fue negado al ex segundo mandatario, Muñoz dispuso la localización y captura de Jorge Glas, para que cumpla lo que le resta de la pena unificada de ocho años.

Loaiza cuestionó que los reportes de las actividades de Glas en prisión ahora tengan un informe desfavorable, cuando su cliente ha cumplido en la medida de lo posible con los programas, por ejemplo, haber estudiado y obtenido dos maestrías. El abogado afirmó que no se entregará a la justicia su cliente y dijo que espera que la Corte Provincial de Pichincha acoja la apelación presentada al fallo de Muñoz.

La tarde del miércoles último, de forma unánime los jueces de la Corte Nacional de Justicia (CNJ), Felipe Córdova, Daniella Camacho e Iván Saquicela, resolvieron negar por improcedente la apelación a la medida cautelar de prisión preventiva que solicitó dentro del caso Reconstrucción de Manabí Jorge Glas. El 5 de enero pasado, el líder correísta recibió una orden de prisión preventiva dentro de un proceso penal por el delito de peculado.

En esta causa Glas es investigado por sus intervenciones como exvicepresidente y expresidente del Comité para la Reconstrucción y Reactivación Productiva y del Empleo. Junto a él también son procesados Carlos Bernal, exsecretario del Comité para la Reconstrucción de Manabí; y Pablo Ortiz, exgerente de la empresa estatal Ecuador Estratégico. A Bernal se le ordenó la medida cautelar de prisión preventiva, mientras que a Ortiz se le definió presentación periódica y prohibición de salida del país.

La fiscal general, Diana Salazar, afirma que los hechos imputados al ex segundo mandatario de Rafael Correa y a los dos exfuncionarios de ese régimen radican en el abuso del dinero público que los ecuatorianos entregaron para enfrentar la emergencia en todas las zonas gravemente afectadas por el terremoto del 16 de abril de 2016.

“Respondieron a un ejercicio abusivo para decidir qué obras sí y qué obras no. Se hicieron las obras a dedo. Dichas obras mal priorizadas y obviamente abusivamente financiadas con dineros de todos los ecuatorianos ascienden a la cantidad global de $ 367′478.972,30 aproximadamente, sin que ni siquiera varias de estas, al día de hoy, hayan sido concluidas o constituyan de alguna utilidad para la población afectada. Se cayeron las casas, pero no construyeron casas, hicieron parques. ¿Para qué? Para beneficiar a sus amigos a dedo”, apuntó Salazar. (I)