El presidente de la República, Daniel Noboa Azín, ratificó dos acuerdos de cooperación en materia militar suscritos con los Estados Unidos para la lucha contra el crimen organizado y sus delitos conexos.

A través de los decretos ejecutivos 164 y 165, emitidos este 15 de febrero de 2024, el primer mandatario ratificó dos tratados internacionales y encargó su aplicación al Ministerio de Relaciones Exteriores y al Ministerio de Defensa Nacional.

Los decretos tienen un solo artículo que, en esencia, establece la «ratificación» de estos instrumentos, que se firmaron en la administración de Guillermo Lasso Mendoza y superaron el filtro de revisión en la Corte Constitucional (CC).

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En septiembre del 2022, la comandante del Comando Sur de los Estados Unidos, Laura Richardson y el embajador de ese país en Ecuador, Michael Fitzpatrick, se reunieron con el expresidente Guillermo Lasso para llegar a acuerdos de cooperación. Foto: Tomada de la presidencia de la República. Foto: Cortesia

La conclusión de este control fue que los acuerdos no requerían de la aprobación de la Asamblea Nacional porque no involucran una alianza militar o bélica, ni actividades de defensa mutua o reciprocidad en acciones militares.

Estos se denominan Relativo a operaciones contra actividades marítimas transnacionales ilícitas y el Acuerdo al Estatuto de las Fuerzas.

Con la suscripción de los decretos presidenciales concluyó el procedimiento legal establecido en la Constitución para que se puedan iniciar las actividades de cooperación entre los dos Estados.

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El 22 de enero, en el Palacio de Carondelet, el presidente Daniel Noboa se reunión con Laura Richardson, comandante del Comando Sur de Estados Unidos, y con Christopher Dodd, asesor del presidente de EE.UU., Joe Biden. Foto: cortesía Presidencia de la República.

En total son tres acuerdos vigentes con Estados Unidos para recibir apoyo y capacitación en operaciones por aire y mar

El acuerdo Relativo al Estatuto de las Fuerzas contempla la autorización del Ecuador para que personal militar, empleados civiles del Departamento de Defensa de los Estados Unidos y contratistas puedan estar temporalmente en el país con relación a visitas de buques, entrenamiento, ejercicios, actividades humanitarias, de cooperación en la lucha contra el tráfico ilícito, el terrorismo internacional y la pesca ilegal.

Tendrán «privilegios, exenciones e inmunidades equivalentes a los otorgados al personal administrativo y técnico de las misiones diplomáticas bajo la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas del 18 de abril de 1961» y cada una de las partes (Ecuador-Estados Unidos) se regirá por las leyes de sus países.

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El Ministerio de Defensa y el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas mantienen bajo reserva cómo se aplicará este convenio.

El acuerdo sobre control marítimo contra actividades ilícitas propone operaciones combinadas entre la Armada Nacional y el Servicio de Guardacostas de los Estados Unidos para prevenir, identificar, combatir, impedir e interceptar las actividades transnacionales ilícitas y se harán solamente contra buques sospechosos, incluidos los que no tienen nacionalidad.

Este tratado incluye operaciones y procedimientos de sobrevuelo y de orden de aterrizaje, que permitirá que las aeronaves militares norteamericanas operen en el espacio aéreo ecuatoriano, siempre bajo autorización y coordinación con el Ministerio de Defensa y para transitar el espacio aéreo nacional.

También podrán aterrizar y permanecer temporalmente en la Base Aérea Simón Bolívar y otros aeropuertos alternos designados por el Ecuador; y, transmitir órdenes de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE) a aeronaves sospechosas que aterricen en territorio ecuatoriano.

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No obstante, los miembros de una fuerza de un país no podrán ingresar en el espacio aéreo del otro sin la autorización expresa del otro país.

Un tercer acuerdo que está vigente desde agosto de 2023 se titula Asistencia en Interceptación Aérea. que lo ratificó el expresidente Guillermo Lasso.

En este caso implica financiamiento, datos de inteligencia, información, capacitación, control y comunicaciones, soporte logístico, datos de radar, principalmente del Sistema Cooperativo de Integración de Información Situacional (CSII, por sus siglas en inglés).

Este CSII muestra, según detalla el acuerdo, la posición de las aeronaves, las pistas de interés y da seguimiento a un radar reubicable más allá del horizonte y para determinar la naturaleza legal o ilegal de un vuelo.

El proyecto estaría en ejecución en la Fuerza Aérea Ecuatoriana, que será la encargada de coordinar las acciones con sus pares de Estados Unidos. (I)