Acapulco está devastado. Qué ocurrió en México con el sorpresivo y potente paso de Otis, un fenómeno meteorológico que pasó en poco tiempo de tormenta tropical a un huracán de categoría 5, la más peligrosa, para desatar su furia en todo el estado de Guerrero.

Las imágenes de hoteles y comercios arrasados, embarcaciones destruidas, vidrios regados por doquier, árboles y postes de electricidad derribados dejan sin aliento desde las redes sociales y la televisión.

Para agravar la situación, varias carreteras en Guerrero colapsaron, al igual que la telefonía. Ante las desoladoras imágenes, la pregunta saltaba de nuevo: ¿qué pasó en Acapulco, en todo el estado?

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En medio de la devastación que comenzaba a conocerse una de las imágenes virales fue el atasco, por el lodo, del vehículo en el que trataba de llegar a Acapulco el presidente Andrés Manuel López Obrador.

“Todo cambió en 20 minutos”

La llegada de Otis fue de madrugada. Hacia las 1:00 del miércoles 25 de octubre los vientos ya no eran normales. Las alarmas de la destrucción causada vino, desde tempranas horas de la mañana, de los medios, de las redes.

Calle residencial afectada por el paso del huracán Otis en el balneario de Acapulco. Foto: EFE/ David Guzmán

La tarde del jueves 26 se dio a conocer que las autoridades declararon el estado de emergencia en Guerrero tras el paso del huracán Otis.

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La zona de la bahía, tan famosa en Acapulco, es un cementerio de yates. “No quedó nada”, lamentó un hombre en un video colgado en Instagram.

“Aquí sigo buscando mi barco, no lo encuentro”, dijo.

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“El hermano menor de El Niño”, el fenómeno poco estudiado que alimenta algunos de los huracanes más destructivos

El fotógrafo David Guzmán contó a la agencia EFE que a eso de las 1:30 de la madrugada “empezó a correr más viento” y las alertas comenzaron a llegar vía Whatsapp sin tomar dimensión de lo que se avecinaba.

Los vientos de 64 kilómetros por hora crecieron a 270 kilómetros por hora.

Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad

“Todo cambió en 20 minutos. El viento comenzó a soplar, a través del ventanal empezamos a ver volar rotoplas (contenedores, tanques, de agua), láminas, los ruidos eran horribles, era espantoso”, rememoró.

Guzmán con una frase trata de ilustrar lo vivido al ver su sala y refrigerador volteados: “Es como si nos hubieran sacudido”.

Dijo que vive en Acapulco desde hace 33 años “y jamás se había visto algo tan devastador como este huracán”.

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El azote del huracán Otis provocó daños en 83 mil 801 negocios de Guerrero, por lo que los empresarios prevén una recuperación lenta del sector de servicios en el estado.

Joaquín López Dóriga, periodista

Todos los pronósticos fallaron, dice experto de la UNAM

Además de las incalculables pérdidas materiales, la mañana del jueves se supo a través de la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, que “Otis” dejó 27 muertos y 4 desaparecidos.

Zona de desastre y dolor en Acapulco. EFE/ David Guzmán

Benjamín Martínez López, investigador del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), explicó en entrevista con el periodista Joaquín López Dóriga qué pasó con “Otis” en Acapulco.

Desde el lado de la ciencia se sabe que “Otis” tocó tierra a las 00:30 (12:30) aproximadamente. Hay estimaciones que expertos hacen con tres días de anticipación y el pronóstico indica cuán fuerte puede ser, pero con este no ocurrió así, dijo.

Eso lo respondió al ser cuestionado sobre la estimación del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, que lo habría alertado por la tarde. Además, la Coordinación Nacional de Protección Civil de México lo informó sobre las 11:00 de la noche del 24 de octubre. Hora y media después, comenzaba el caos.

“Fue un huracán bastante complejo, pasó de tormenta tropical a huracán en unas horas. Todos los pronósticos fallaron, no solo los mexicanos sino los estadounidenses”.

Básicamente lo que ocurrió fue una intensificación muy fuerte que se debió a una gran cantidad de energía acumulada en algo que se conoce como la alberca tropical mexicana.

Cuando la tormenta siguió su trayectoria y se dio la interacción con esas aguas muy cálidas pasó de tormenta a huracán 1,2,3,4,5 en tiempo récord, explicó el experto.

Huracán Otis alcanza la categoría 5 y se prevé que toque tierra en la costa sur de México

Se rompió el récord histórico de intensificación en México, que era de 24 horas con el huracán Patricia, en 2015.

Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad

La energía que un huracán necesita para formarse es, precisamente, energía térmica y esa está contenida en los primeros metros de los océanos.

Relacionados con el cambio climático “hemos estado viendo cómo hay ondas de calor en los océanos que se han estado incrementando y en particular en junio y julio de 2023 se rompieron todos los récords que se tienen desde 1950″.

El centro de Acapulco está irreconocible. Entre 1:30 y 3:30 de la madrugada del miércoles todo fue confusión, devastación. Al amanecer, la gente se topó con cadáveres en la calle. Foto: EFE/David Guzmán Foto: PanoSoporte

Para entender que pasó con una perturbación que se generó y comenzó a viajar llegó a un reservorio increíble de energía y en cuestión de horas pasó de una tormenta tropical a un huracán.

Así, pues, “agarró desprevenidos a todos porque realmente para poder haber hecho un buen pronóstico se debería tener un conocimiento muy certero de las condiciones de frontera, del mar y eso, desgraciadamente, dista de tenerse”. (I)

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