Mauricio Pozo Crespo, ministro de Finanzas del gobierno de Lucio Gutiérrez (2003-2004), vuelve a esas funciones tras la renuncia de Richard Martínez. El anuncio oficial lo hizo el presidente Lenín Moreno en un evento en el cual promocionaba la ampliación de la Red de Protección Social para los más vulnerables. Pocos minutos después se conoció del nombramiento oficial a través del Decreto 1168.

Apenas se anunció la decisión, empresarios y académicos celebraron la designación considerando que el nuevo funcionario es una persona que conoce de la materia. Pozo es economista y máster en Economía de la Universidad de Notre Dame de Indiana (EE. UU.).

Pero, además, el actual ministro tiene experiencia en llevar adelante los acuerdos con el FMI. En febrero del 2003 firmó una carta de intención con la entidad y luego tuvo que renegociarla porque el país no cumplió con algunos compromisos.

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Pozo Crespo llega a la cartera de Estado con cuatro objetivos clave, que buscará concretarlos pese a que reconoce que estará un corto periodo al frente de dicha cartera. Esos son fortalecimiento del programa económico, dar fuerza a los avances que se han alcanzado, fortalecer la dolarización y convocar a un diálogo nacional para encontrar consensos básicos que el Ecuador requiere, independientemente del acuerdo con el FMI.

Según la visión del ministro Pozo, Ecuador tiene problemas en su estructura laboral que está sustentada en criterios obsoletos. Para el funcionario, Ecuador no puede seguir con un sistema de Seguridad Social que no es sostenible. Y sin duda alguna se requiere un cambio en el ámbito tributario que corrija ineficiencias que existan, simplifique el sistema, elimine unos impuestos, optimice otros para atraer la inversión extranjera.

Sobre la posible reforma tributaria que consta en el informe técnico del Fondo Monetario, que sirvió de base técnica para el acuerdo, Pozo dijo que esta podría ser revisada por las autoridades.

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Según él, el incremento del 12 % al 15 % del IVA no está escrito en piedra y podría ser revisado, pero tomando en cuenta las metas propuestas de reducir el déficit.

El ministro reconoció la gestión de Martínez, por haber dado a la economía un norte distinto del que venía arrastrando desde hace más de una década y explicó que los viceministros actuales Estaban Ferro y Fabián Carrillo le seguirán acompañando en su gestión.

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Entre tanto, Martínez confirmó que su salida se debe, entre otros factores, a una propuesta que le ha hecho el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para ocupar la vicepresidencia de países en ese organismo multilateral. Al ser consultado sobre la prohibición que existe en el artículo 153 de la Constitución de que ministros o altos funcionarios de ministerios puedan ser funcionarios de instituciones financieras internacionales acreedoras del país, explicó que se han hecho consultas a varios juristas que sostienen que no habría problema de legalidad, pues el BID no es una entidad financiera, sino de desarrollo.

En su carta de renuncia, Martínez recordó que le tocó tomar una economía al borde del colapso, con grandes problemas estructurales, y recordó que el camino a la recuperación se vio afectado por una paralización “con oscuros intereses” y luego vinieron los efectos de la pandemia.

Martínez, de acuerdo con Moreno, cumplió un ciclo en la cartera de Economía. Es que Martínez acaba de firmar con el Fondo Monetario un nuevo Acuerdo para que se le entreguen al país $ 6.500 millones en 27 meses. De esos, $ 4000 llegarán este año.

Entre los compromisos que adquiere el país como parte de ese acuerdo está la implementación de una reforma tributaria que incluye el incremento del IVA en 3 puntos (15 %), la eliminación de la devolución del IVA para personas de la tercera edad, impuesto a la gasolina y a las emisiones de CO2. Pero esta deberá ser implementada por el próximo Gobierno.

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Martínez sale del cargo en medio de pedidos de juicio político que estaba tramitando la Asamblea. (I)