Al menos 91 vuelos presidenciales realizados al exterior en los últimos cinco años del gobierno de Rafael Correa registraron irregularidades. Por ejemplo, despegaron sin autorización de la Secretaría General de la Presidencia, trasladaron a personas que no eran funcionarios y a comitivas de otros países, aterrizaron en 24 ocasiones en paraísos fiscales, transportaron equipaje sin los chequeos de rigor. Incluso, en junio del 2012, el Legacy 600 fue y volvió de Río de Janeiro sin ningún pasajero.