El expresidente de la Corte Suprema de Justicia, Guillermo Pichi Castro Dáger, insistió en que los procesos por peculado que se le iniciaron al exmandatario Abdalá Bucaram Ortiz fueron nulos porque no se cumplieron con los requisitos constitucionales de procedibilidad.

Castro Dáger declaró la nulidad de los juicios en el 2005; tras ello, Bucaram pudo regresar al país por unos días.

Pero al año siguiente, el entonces presidente de la Corte, Jaime Velasco, determinó la nulidad de sus fallos en los casos de Bucaram y de Alberto Dahik y Gustavo Noboa, con características similares.

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En una providencia del caso Dahik, el juez Hernán Ulloa señaló que “las instituciones de la inmunidad presidencial y del juicio político, claves del constitucionalismo moderno, no son un invento de Castro Dáger”.

Según Pichi Castro, Velasco no podía declarar “la nulidad de la nulidad”. (I)