Tareck el Aissami, de origen sirio-libanés, identificado como radicalmente chavista en su perfil de Twitter y considerado el hombre de hierro sucesor del oficialismo, se mostró molesto ayer con las sanciones de EE.UU., que lo acusó de procurar el envío de cargamentos de droga desde Venezuela, incluyendo el control de aviones que partían de ese país, así como el control de rutas.