El aumento en las cifras de femicidios, a un promedio de un caso cada 48 horas, así como las de crímenes de distinta índole, de los que solo en los últimos cuatro días se han contabilizado nueve casos, obligaron a las autoridades de Policía y de los ministerios del Interior y de Justicia a moverse por al menos tres provincias del país en los últimos tres días, a realizar reuniones con personeros locales y anunciar planes para atenuar este repunte violento.