Entre el temor y la necesidad de evacuar se hallaban ayer los moradores de Muisne. La noche del domingo, la mayor parte de la población abandonó la isla por los sismos de magnitud 5,9 y 6,2 en la escala de Richter, que tuvieron su epicentro en este cantón. Decenas de familias se ubicaron en albergues o donde familiares.