El Estado Islámico (EI) es considerado el grupo terrorista sunita –una de las ramas del islamismo– con más recursos económicos en el mundo. Su principal fuente de financiamiento proviene del petróleo que hay en unos 40.000 km² del área que controla, esta abarca el 50% de Siria y zonas del este de Irak, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. Además, ha tomado parte del arsenal de los ejércitos de ambos países.