Los productos farináceos (a base de harina o parecida a ella), como el pan, pastas alimenticias y fideos, producidos en el país o importados, deben cumplir requerimientos que eran voluntarios en anteriores normativas. Adicionalmente, deben obtener un certificado de conformidad para su comercialización en el país; esto último no aplica si se cuenta con el sello de calidad INEN.