Un ocurrente ‘sabio’, de los que abundan en las radios porteñas, dijo alguna vez que en las épocas del viejo estadio George Capwell y del Modelo llegaron futbolistas extranjeros que eran “simples gitanos” que andaban “con zapatos de juego en una funda” y se ofrecían como refuerzos en los equipos nacionales. Los contrataban “dirigentes inexpertos que se dejaban engañar” por el cuento de sus “hazañas” en grandes equipos de sus países de origen. Concluyó afirmando que en ese tiempo “no se sabía jugar al fútbol” en Ecuador. Lo triste es que nunca vio un solo partido de esos años y, obviamente, no puede juzgar a clubes ni a jugadores.