Aunque en abril pasado se confirmó que el volcán Chimborazo, en Ecuador, era el punto más cercano al Sol en la Tierra, a causa de la forma geoide de nuestro planeta, el monte Everest sigue siendo la montaña más alta del mundo, y una de las más difíciles de escalar, solo superada por el K2, ambos ubicadas en el Himalaya, en Asia.