“Así pues sí”, diría el genial Chavo del 8. Después de haber visto Real Madrid 1 - Liverpool 0 y Ajax 0 - FC Barcelona 2 por la Champions, más tarde Saint Ettiene 1 - Inter 1, insulso compromiso por la Europa League, nos enfocamos en nuestra Copa Sudamericana, menos pomposa y más caserita. Telespectamos Emelec 3 - Sao Paulo 2; Cerro Porteño 1 - Boca 4; River 3 - Estudiantes 2 y César Vallejo 0 - Nacional 1, todos por cuartos de final. Las sensaciones fueron magníficas al cabo de los cuatro: emociones, espíritu ofensivo, bonito fútbol, intensidad, ida y vuelta constante, cero especulación, muchos goles (al menos en los tres primeros). En suma: partidazos. Se pareció al Mundial, donde los equipos salían a ganar en lugar de a no perder. Tan lejano de aquellos tiempos coperos en que los visitantes se atrincheraban atrás desde el minuto inicial. Por fin debemos atribuir tales alabanzas a un torneo sudamericano y no europeo. Por fin nos motiva escribir de acá.