A bordo de un viejo Citröen pintado como un balón blanco y negro, dos jóvenes franceses recorren América rumbo a Brasil para asistir al Mundial. Para ellos el fútbol es un lenguaje y un pasaporte universales.
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Los dos jóvenes son franceses y en su viaje a América aseguran que la jornada no ha sido peligrosa y que el miedo "es una fantasma".
A bordo de un viejo Citröen pintado como un balón blanco y negro, dos jóvenes franceses recorren América rumbo a Brasil para asistir al Mundial. Para ellos el fútbol es un lenguaje y un pasaporte universales.
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