El delantero brasileño de 19 años, Roque Junior Maurides, pasó de la alegría a la tristeza en el partido que su equipo Internacional ganó ayer por 3-1 al America, por la Copa de Brasil.El atacante, quien vulneró la portería rival con un cabezazo en el minuto 88, festejó con la conocida "mortal", donde el jugador gira hacia atrás. En la primera pirueta no tuvo problemas, pero al caer por segunda vez, se lesionó.“Sufrió un esguince en la rodilla derecha, que parece leve. Haremos pruebas, pero no nos preocupa el período de recuperación. Parece más un susto que algo grave”, dijo el médico del club tras el incidente, que obligó a que Maurides saliera en camilla.