QUITO
.- El próximo viernes, 24 países suscriptores de la Convención Americana de Derechos Humanos (CADH) se darán cita en Guayaquil para debatir trece reformas planteadas al Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH), ambos órganos de la Organización de Estados Americanos (OEA).
El objetivo es incidir en que los países miembros firmen o ratifiquen su adhesión a la CADH y acepten la jurisdicción contenciosa de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH).
Sobre este tema, el presidente Rafael Correa ha considerado “aberrante” que la sede de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sea en Washington (EE.UU.) pese a que no es suscriptor de estos acuerdos.
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Por ello se plantea la universalidad del sistema y que se dejen atrás las “tibias exhortaciones” de adhesión. Otra modificación se refiere a la aplicación de medidas cautelares en casos de que se observe una violación de derechos humanos por parte de los estados miembros.
En junio del 2011, se integró un Grupo de Trabajo Especial de Reflexión sobre el funcionamiento original de la CIDH, que planteó la necesidad de establecer “reglas más claras para el funcionamiento y operación” de estas medidas sin que ello signifique obstaculizar la protección de las personas.
En ese sentido, se formularon doce recomendaciones entre las que están la definición de criterios o parámetros más precisos para el otorgamiento, revisión, prórroga o levantamiento de medidas cautelares.
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En los últimos días, el canciller ecuatoriano Ricardo Patiño estableció una ruta de viajes por México, Chile, Argentina, Brasil, Colombia, República Dominicana, Haití y Venezuela con el fin de generar opiniones y adhesiones entre sus pares sobre los cambios al SIDH.
Patiño cree necesario que el informe elaborado por ese grupo de trabajo sea la base que la OEA considere para aplicar estas reformas a la CIDH y sus relatorías, sobre todo, la de Libertad de Expresión.
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La delegación ecuatoriana que integró el grupo presentó en diciembre del 2011 un informe con recomendaciones sobre cómo deben financiarse estos órganos. En el documento, no comparten que “sea una tarea de la SIDH buscar sus fuentes de financiamiento” porque de ello debería encargarse el Fondo Regular de la OEA, lo que garantizaría su “independencia”.
Para argumentar este hecho, se presentó un documento en el que se describen cuántas relatorías integran la OEA –que son ocho– y la procedencia de sus aportaciones económicas.
Es así que se recomienda la elaboración de un Código de Conducta para regular la gestión de las Relatorías.
Además, solicita que sus informes anuales, sobre todo el de la relatoría para la Libertad de Expresión, “sean presentados de igual forma en la misma sección” de todas las relatorías, pues “no se explica” que tenga una sección especial en el informe anual de la CIDH.
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El Gobierno ecuatoriano ha hecho críticas a esta instancia. En febrero, el presidente Correa dijo: “Por qué de las ocho relatorías que tiene la Comisión Interamericana de Derechos Humanos la única que tiene financiamiento propio es la Relatoría de la Libertad de Expresión. ¿La libertad de expresión es más importante que otros derechos? ¡No! Los niños, mujeres y discapacitados no tienen capitales detrás de ellos”.
El análisis de estas modificaciones entran a debate días antes de que la OEA instale, el próximo 22 de marzo, una Asamblea General Extraordinaria en la que deberán acoger o no estas recomendaciones.
Se analizarán:
Medidas Cautelares, Requisitos para la consideración de peticiones, Tramitación inicial, Procedimiento de admisibilidad, Decisión sobre admisibilidad, Procedimiento sobre el fondo, el archivo de peticiones y casos, Informe sobre el fondo, Suspensión del caso para sometimiento del caso, Informe anual, Peritos, Medidas provisionales, Modificación del reglamento.
El equipo
Argentina, Brasil, Estados Unidos, México, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, Uruguay y Colombia fueron los países que integraron el grupo de trabajo que elaboró las propuestas de cambio del Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH).
Propuesta
La CIDH abrió un proceso de consulta pública sobre estas reformas en su página web, pero ninguna refiere a la petición del régimen ecuatoriano sobre el cambio de sede de la OEA. El canciller Ricardo Patiño ha insistido en que este sea un eje de debate de los países miembros.
