Los ojos de Byron Velásquez Briones, seguidor de Emelec, se enrojecen cuando recuerda el 10 de noviembre último y vio llegar a su madre, Norma, a la Penitenciaría, donde seis días antes había sido recluido por un crimen (el del hincha de Barcelona, George Michael Murillo León), que asegura no cometió. Le indigna el daño moral que sufrió tras ser acusado. Por eso pide al ministro del Interior, José Serrano, que se disculpe (el 6 de noviembre él expresó: Con la prueba electrónica se determina que –Lagartija– utilizó un arma de fuego..., lo que da más certeza a la investigación judicial). “Así como salió a decir que yo era asesino y casi me sentenció públicamente; por mi madre, por mi hermano, por mi hija, mi mujer, debería rectificar”. Con sus abogados, Osvaldo Dávila y Hernán Ulloa, planea demandar al Estado por todo el daño que le han causado.