Los cigarrillos constan entre los productos que vende Julio Holguín en su despensa, ubicada en la esquina de Quisquís y Carchi. Él no imaginó que un cliente se arrepintiera de comprar el producto al ver que la cajetilla traía la foto de una boca con llagas y la frase: Fumar destruye tu dentadura y tu boca. Le devolvieron la cajetilla diciéndole "toma, ya no quiero esto", evoca.